TEATRE BIOLÒGIC?  BIOLOGIA TEATRAL?

Patricia y Laura decidieron un buen día hacer un gran cartel que ponía: ¿Vols fer teatre? Vine dimecres a les 13h a la Sala d’Associacions.

Eva Colás y yo asistimos junto con un gran número de gente a la llamada. Sin embargo en la associació no había nadie que lo organizase. ¿Dónde se habían metido? De repente sonó el teléfono y yo, tan decidida como siempre, contesté. Laura me explicó que estaba liada y Patricia llegaba tarde…por favor, podrías encargarte tú? Así fue como asumí la responsbilidad del grupo…¿fue el azar, o fue el destino?. Apunté emails y teléfonos. La idea me entusiasmaba. Junto con Eva Colás en diversas charlas decidimos que el grupo se llamaría "Bioteatre" porque a todo lo que estaba en la Universidad de Biología le poníamos ese prefijo ("Biobanc", "Biofesta", "Biomarxa"….Bioteatre!). A Patricia y Laura les pareció bien la idea y después de algunas gestiones decidimos hacer de nuevo otro llamamiento con un nuevo cartel. Así es como María José Amor junto con otros compañeros como David, María Brufau,…entraron a formar parte de Bioteatre.

Fue en la primavera del 2002. Al pasar hacia el Aulario, vi un cartel que ponía algo así como: ¿Vols fer teatre amb nosaltres? Escriu a Bioteatre@yahoogroups.com i posa’t en
contacte amb nosaltres

Recuerdo que les escribí….aludiendo que para el papel de "àvia" o bruixa"
siempre podía servir…..y fui aceptada. Lo componían sólo alumnos: Gemma Molero,
Patricia, Creo que ya estaba David…..y así nos reuníamos entre nosotros y los
más 2 enterados" proponían tareas a realizar. La cosa no duró: la gente fallaba,
se acercaban los exámenes…..Y un día con Gemma, que era la que llevaba la voz
cantante, decidimos que había que buscar un Director.
Con toda su buena fe, encontró a un conocido, que , en plan "guay" y casi
"cumbayá", se comprometió durante el curso 2003-2004, a impartirnos clase los
viernes de 2-4……Al principio, parecía que funcionaba, aunque ya nos extrañó de
entrada la teoría de la hipnosis para relajar a los actores….pero doctores tiene
la Santa Madre Iglesia, y nosotros éramos sólo unos pardillos.
Siguió con las teorías de Stanislavski, en las cuales parece ser que tenías que
revivir escenas de tu vida para ponerte en trance si eran divertidas, vale, pero
si eran trágicas casi salías llorando: es más, un día vi cómo en una sesión en
la que mezclaba recuerdos y a la vez una especie de esoterismo (trazaba círculos
con las manos encima de la cabeza de una chica) consiguió hacerla llorar a
lágrima viva……Y la degeneración progresó: la mitad de días brillaba por su
ausencia….y la otra mitad "enseñaba" esoterismo, que la verdad, puede ser
interesante para una charla….pero no vas a clase de teatro para eso….´
Pero lo peor fue la cuestión monetaria: sabido es cómo llegan a cuentagotas las
subvenciones…..y él, tan altruista reclamaba el monney: patético. Acabó la pobre
Gemma dándole sus ingresos de Navidad, y los demás contribuimos en lo que
pudimos buenamente……a pesar de todo, y por nuestra cuenta (no se dignó a hacer
acto de presencia) el día de la Biofesta hicimos una "performance" sobre la
guerra de Irak….que modestia aparte quedó muy bien.
….Y nos vimos abandonados….Intentamos remontarlo, haciendo una obra escrita por
David…pero si no hay un director de orquesta….los instrumentos desafinan, claro.
Así, que a final de curso del 2003-2004 pensé:¿por qué no lo remonto yo? No por
nada, solo por el "peso específico" de que dispongo, así como de la
continuidad….Di voces, me mandaron curriculums…..y un día, Eva Bonastre me mandó un mail que decía: "mírate este otro candidato…" Y ese candidato, nuestro
querido Ezequiel, que SI que tuvo que saber lo que era el altruismo, se quedó y
levantó el grupo.
Logramos que fuese "elevada" a "Asignatura de Libre Elección" y, aparte de
pasarlo bien, aprendemos cosas altamente positivas, desde la educación de voz
hasta la relajación, y sobre todo, a algo que cada vez se pierde más: SER PERSONAS
 

Por todos es bien sabido que la mente es caprichosa a la hora de relegar unos recuerdos en favor de otros. Por ese motivo, las impresiones que sentí cuando llegué por primera vez a Bioteatre permanecen en mi memoria de forma vaga y difusa.

La primera vez que entré en contacto con el grupo de teatro fue como público de la primera muestra que realizaron. Me pareció solaz y fresca pero nunca pensé en dejar la postura pasiva del espectador. Quién me iba a decir que un tiempo después formaría parte del elenco que realizaría la segunda representación.

Pasó un año antes de que nuestros caminos se cruzaran de nuevo. Como suele suceder en estos casos, la manera en que nuestro sino nos acomete es, cuanto menos, curiosa.
Todo empezó con un recado: debía devolver unos apuntes a un integrante del grupo. Quizá era porque no coincidíamos en clase, quizá porque después yo tenía prácticas, quizá porque a él le hacían falta los apuntes para prácticas o quizá por algún otro motivo que no alcanzo a recordar. Sea como fuere, la única opción que parecía tener era la de entregar los apuntes de marras a la hora del ensayo.

La puerta del aula estaba entornada y, conforme me acercaba, el típico jolgorio previo a cualquier clase crecía. Todavía no habían comenzado. Asomé la cabeza por el quicio de la puerta y allí estaban. Sólo habían llegado tres o cuatro alumnos y el dueño de los apuntes no estaba entre los presentes. “Perfecto” pensé para mis adentros y antes de que pudiera articular palabra alguna se me acercó la persona que un año antes había visto presentar la muestra. Con una sonrisa franca y unos ojos brillantes me preguntó si venía a unirme al grupo. Le dije que no, que tan sólo había venido a dejar unos apuntes a un compañero. Dejé encargado que le dieran los apuntes y me marché.

Cuando ya me había alejado bastante me acechó la enojosa voz de la conciencia recriminándome por haber rechazado una invitación. Y como una cualidad intrínseca de la conciencia es la capacidad de no callar hasta que es obedecida, a la semana siguiente me planté delante de Ezequiel y le dije:

- Bueno, vengo a probar ya que está muy feo eso de rechazar una propuesta.

Ése fue mi principio de mis andaduras en el grupo de Bioteatre y a la vez, el final de este texto.
 

Un día, en la Coral de Bio, la Laura Tobaruela me invitó a participar en Bioteatre. Así entré a formar
parte de La Familia y acabé ,aún no se bien cómo, siendo una de los fundadores. Amor ya ha descrito lo
del profe que tuvimos antes que Ezequiel, así que... olvidemoslo. Después vino el periodo en el que no
habían clases pero David, Laura y yo escribimos un musical (mezcla Tienda de los Horrores y larva
trocofora mutante) que no llegó a representarse (ojalá que algún día porque era muy divertido -el guión
lo tiene el David que es quién cargó con el peso de la redacción del guión-). No he tenido la suerte aún de
poder asistir a las clases de Ezequiel (trabajo, clases,...) aunque sé que el cambio ha sido bueno y que a
todos os gusta (ei, que aunque no vaya por clases me leo los mails!). Espero que la magia y la ilusión de
Bioteatre no desaparezcan de Biología. Un beso a todos los que haceis posible que bioteatre sea una
realidad y siga funcionando.

El que escriuré ara és la meva versió dels fets, podrà ser contrastada, doncs repassar la història enrera té aquestes coses...

Doncs el que recordo és d'estar amb la Patrícia Gómez al Local d'Estudiants de la Facultat de Biologia i comentar "en aquesta facultat cal un grup de teatre!".
Immediatament vam decidir convocar una trobada per la gent que pogués tenir aquest mateix interès i a partir d'aquí, veure com podríem organitzar-nos.

Vam agafar paper d'embalar de consergeria, i amb les pintures del local la Patrícia va dibuixar una girafa fent malabars i vam escriure un text "Vols fer Teatre? Vine a la reunió al local d'estudiants dia... hora...".

El vam penjar al solàrium entre l'aulari i l'edifici gran.

Ara ve la part curiosa, a aquella reunió no hi vam poder assistir cap de les dues. Jo vaig trucar al local, em penso que s'hi va posar la Gemma. Li vaig explicar que no veníem ni la Patri ni jo, i vam quedar de fer una llista amb els assistents i poder convocar-los de nou més endavant. No sé què va passar en aquella trobada.

Ens vam tornar a trobar a l'aula de l'esquerra dels lavabos de la planta baixa de l'aulari. Ara sí, amb pluja d'idees. La Gemma coneixia un professor de teatre del seu poble, el faria venir. Em sembla que es deia Xevi, em smebla que no cobrava, o no ho recordo bé. Era una mica estrany, es dedicava a l'hipnosi i coses així.

Va estar bé per començar, però no va durar gaire. Vam estar fent coses pel nostre compte també, si no recordo malament.

Finalment, i no recordo com, va aparèixer l'Ezequiel.

Entremig l'Eva Bonastre i jo vam decidir muntar un musical a la facultat i vam estar movent fils, buscant actors, pensant la trama i cançons, coreografies, ... En David Cruz va escriure el guió amb nosaltres. Va quedar així, no en vam fer res més. Suposo que vam triar entre acabar la carrera o dur a terme aquest projecte.

Voilà, m'agradaria llegir els altres textos per recordar més!